jueves, 7 de marzo de 2013

“NUBES DE PLASMA, ¿EL ARMA DEL FUTURO?”

La Fuerza Aérea de los Estados Unidos, a través de su enigmático proyecto HAARP (cuya traducción al castellano sería Programa de Investigación de Aurora Activa de Alta Frecuencia), ha logrado un nuevo hito en el desarrollo experimental de tecnologías que podrían instrumentarse como armas en un futuro no muy lejano. Esta vez, según anunció el Naval Research Laboratory, se ha conseguido una nube de plasma artificial de alta densidad que se mantuvo en la atmósfera superior de la Tierra durante una hora; en las pruebas anteriores, la duración máxima de este fenómeno había sido de diez minutos. Según la Agencia de Proyectos Avanzados del Pentágono (DARPA), responsable de financiar el desarrollo de la nube de plasma, este proyecto tiene como finalidad la exploración de fenómenos de la Ionosfera y su impacto en las comunicaciones y la meteorología. No obstante, especialistas de todo el mundo advierten que se trata, en realidad, de la construcción de un arma experimental, cuya utilización podría afectar de manera dramática al clima y al campo electromagnético de la Tierra. Los más alarmistas explican que una nube de plasma de estas características podría crear un hueco en la atmósfera y alterar energías magnéticas al punto de modificar drásticamente los ecosistemas, con la consecuente destrucción de los recursos naturales. El debate está abierto, la información es escasa, y mientras tanto los laboratorios de las potencias mundiales continúan con su labor, quien sabe en qué dirección.

No hay comentarios:

Publicar un comentario